Casi 1:40 de la tarde. Justamente voy llegando de una ceremonia donde mi jefe resultó galardonado por ser un distinguido saltillense. Es viernes. Tengo una carta pendiente por escanear y enviar por mail, y bueno, ni qué decir de las más de 400 páginas que me piden a gritos una sexta revisión. Los 29 grados centígrados que decía la radio camino a la oficina se sentían como 35 o más, pero ya aquí todo cambia: un vaso con agua fresca al lado, el minisplit a 20 grados… ¡cuánta diferencia!
A tres minutos de las dos estoy a punto de escanear con éxito la carta. De un tiempo hacia acá el escáner se pone sus moños y sólo acepta ser leído por PhotoShop, algo que me incomoda cuando trabajo con textos. Bien, PhotoShop se cicló y tal parece que hasta ahora ha querido funcionar. Suena el escáner… volteo a verlo con cara de “qué ruidoso eres”… ha terminado… ojalá ahora sí quede. Esperaré que me lo indique, generalmente termino por hartar a mi PC con tantos clicks. Ha encendido la ventana… veremos.
Ya pude… pero bueno, el post de hoy no se tratará de mis intentos por hacer que el equipo trabaje con fluidez, sino de que ya es viernes, y no cualquier viernes.
Son las 2:20 de la tarde y estoy a una hora con 40 minutos de salirme de esta oficina por más de una semana. Si, me voy de vacaciones. Uy, hacía mucho tiempo que no decía esa palabra. Esperé con ansia los días santos, hice planes, llamé a mi familia… y nada. Pero esta vez los días libres son ciertos, y se aproximan un poco más lentos de lo que tardarán en transcurrir…
¿Qué haré en esos días? La respuesta es fácil: nada. Me iré a encerrar en la casa de mis papás, sin msn, sin blog, sin llamadas de la oficina, sin ropa qué lavar, sin preocuparme por la comida del día… aún no sé si llevarme a Tizzy, por aquí me dicen que la deje con alguien pero si apenas la
aguanto yo, no creo que otro le vaya a cumplir sus caprichos… al fin mujer.
Bien, hoy es un viernes de los que sí me gustan; hoy cumple años un antiguo conocido ahora nuevo amigo y nos iremos a festejar mientras escuchamos cantar a Delgadillo (o mejor dicho, él cantará mientras festejamos jaja, -Felicidades de new Francisco-) ; también haré mi maleta, donde seguramente faltará algo de lo que me enteraré cuando ya esté en casa; y bueno, hoy salgo de vacaciones… sin inglés… sin gimnasio… sin jefe… qué más puedo pedir??
2:40 p.m. Una hora 20 y soy libre.
A tres minutos de las dos estoy a punto de escanear con éxito la carta. De un tiempo hacia acá el escáner se pone sus moños y sólo acepta ser leído por PhotoShop, algo que me incomoda cuando trabajo con textos. Bien, PhotoShop se cicló y tal parece que hasta ahora ha querido funcionar. Suena el escáner… volteo a verlo con cara de “qué ruidoso eres”… ha terminado… ojalá ahora sí quede. Esperaré que me lo indique, generalmente termino por hartar a mi PC con tantos clicks. Ha encendido la ventana… veremos.
Ya pude… pero bueno, el post de hoy no se tratará de mis intentos por hacer que el equipo trabaje con fluidez, sino de que ya es viernes, y no cualquier viernes.
Son las 2:20 de la tarde y estoy a una hora con 40 minutos de salirme de esta oficina por más de una semana. Si, me voy de vacaciones. Uy, hacía mucho tiempo que no decía esa palabra. Esperé con ansia los días santos, hice planes, llamé a mi familia… y nada. Pero esta vez los días libres son ciertos, y se aproximan un poco más lentos de lo que tardarán en transcurrir…
¿Qué haré en esos días? La respuesta es fácil: nada. Me iré a encerrar en la casa de mis papás, sin msn, sin blog, sin llamadas de la oficina, sin ropa qué lavar, sin preocuparme por la comida del día… aún no sé si llevarme a Tizzy, por aquí me dicen que la deje con alguien pero si apenas la

Bien, hoy es un viernes de los que sí me gustan; hoy cumple años un antiguo conocido ahora nuevo amigo y nos iremos a festejar mientras escuchamos cantar a Delgadillo (o mejor dicho, él cantará mientras festejamos jaja, -Felicidades de new Francisco-) ; también haré mi maleta, donde seguramente faltará algo de lo que me enteraré cuando ya esté en casa; y bueno, hoy salgo de vacaciones… sin inglés… sin gimnasio… sin jefe… qué más puedo pedir??
2:40 p.m. Una hora 20 y soy libre.